Plenitud, cero preocupaciones, cero sufrimiento, cero apego... ¡Imagínate sentirte así! Un sueño, ¿verdad? Este estado de gracia y liberación mental, física, psicológica y espiritual es lo que el budismo denomina nirvana. Una traducción de este término, directamente del sánscrito, da una medida de lo que es este estado: "el fin del sufrimiento".

Puedes imaginarte, también, que alcanzar tal estado requiere mucho estudio, mucho conocimiento, mucho autoconocimiento y muchas más prácticas y hábitos, ya que la recompensa es tan maravillosa. Por eso, para guiarte en el camino hacia el nirvana, hemos preparado este artículo con la información más esencial sobre este estado de gracia ¡Échale un vistazo!

¿Cómo alcanzar el nirvana?

En primer lugar, es necesario saber que el budismo, a diferencia de otras religiones (como las que ofrecen la vida eterna a los justos, por ejemplo), no tiene el nirvana como meta, porque entiende que el camino de cada uno es individual y cada uno tiene sus propias metas y búsquedas.

Sin embargo, si alcanzar este estado de gracia, sin sufrimientos ni preocupaciones y con mucha plenitud es tu gran objetivo, consulta los consejos que el budismo denomina el Noble Óctuple Sendero, que es el viaje que te conducirá al nirvana:

1. meditación

La meditación es uno de los pilares para alcanzar el nirvana, porque nos permite organizar nuestros pensamientos y sensaciones, además de ayudarnos a limpiar nuestro espíritu de todo lo malo, quedándonos con lo bueno, pero sin apegos. La meditación, en definitiva, te ayuda a comprenderte a ti mismo y también al mundo.

2. evitar las ilusiones

Buena parte de nuestro sufrimiento proviene de nuestras propias ilusiones e idealizaciones, por eso necesitamos tener lo que el budismo llama la "visión correcta", que es una visión que trata de evitar esas ilusiones y el dolor emocional que surge cuando nos desilusionamos y decepcionamos. Por tanto, debemos ver el bien como el bien y el mal como el mal.

3. cuida tus intenciones

Todas nuestras acciones parten de nuestras intenciones, por lo que necesitamos vivir con buenas intenciones, rechazando sentimientos como el odio, el egoísmo, la venganza, la violencia, entre otros, pues si alimentamos estas intenciones, eventualmente podremos actuar movidos por ellas.

4. elija cuidadosamente sus palabras

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No es un tópico decir que las palabras pueden herir más que los golpes, por lo que debemos elegir muy bien todo lo que decimos, sea cual sea la conversación, el contexto y a quién nos dirigimos. Nuestras palabras reflejan nuestras intenciones y, en consecuencia, la persona que somos.

5. tener postura

Si las palabras son importantes y las intenciones también, las acciones son igualmente relevantes. Por lo tanto, necesitamos adoptar una actitud cuidadosa y amorosa hacia nuestro prójimo, actuando siempre con honestidad, empatía y preocupación por la colectividad, por el mundo, por la naturaleza y por nuestro prójimo, ya sea humano o animal.

6. no abandones tus valores

Aunque vivamos en un mundo movido por el capital, no podemos vender nuestros valores a cambio de dinero, por lo que hay que encontrar una profesión, así como hábitos y costumbres que tengan que ver con lo que vibra nuestro corazón. No es un buen camino creer en la honradez y tener un trabajo en el que se engaña a la gente, por ejemplo.

7. estar siempre presente

Mindfulness es un término que se ha popularizado recientemente y que indica que debemos hacer todo con la mente plenamente presente en el momento que se está viviendo. Así, si estás lavando un plato, céntrate en el plato; si estás manteniendo una conversación, presta atención a la conversación... y así sucesivamente.

8. la salud mental es esencial

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Tu mente es tu director de orquesta, es como si fuera el jefe y tu cuerpo el subordinado, por lo que debes cuidar y esforzarte por curar cualquier enfermedad que te aflija psicológicamente, como la melancolía, la depresión, la ansiedad, etc., porque estos problemas distorsionan negativamente tu visión del mundo y te alejan de la plenitud.

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En fin, ésta era la información principal sobre este estado de gracia budista conocido como nirvana! Si tu objetivo es vivir una vida con cada vez menos preocupaciones, tristezas y ansiedades, éste podría ser tu camino. Sin embargo, recuerda: el objetivo es ser feliz y ser una buena persona, y si llega el nirvana, ¡mucho mejor!