Dormir bien es esencial para todos. Dependiendo de la edad de cada persona, puede necesitar doce, ocho o siete horas de sueño. Es el tiempo que el cuerpo necesita para recuperar energía, fijar recuerdos y funcionar correctamente.

Además, dormir bien aporta beneficios físicos, mentales y espirituales. Físicamente, dormir bien reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, favorece la inmunidad, aumenta la concentración y evita accidentes causados por el cansancio.

Los beneficios mentales de una buena noche de sueño incluyen el alivio del estrés, la mejora del estado de ánimo y la facilidad para resolver problemas, tanto con uno mismo como con otras personas. Por último, los beneficios espirituales de una buena noche de sueño son el favorecimiento de la evolución espiritual, el fortalecimiento de la conexión entre cuerpo y mente e incluso la recepción de mensajes del Universo a través de los sueños.

En otras palabras, tu calidad de vida aumenta considerablemente cuando puedes dormir bien. En lugar de terminar y comenzar tus días con una sensación de agotamiento físico, mental y espiritual, tendrás la fuerza y el entusiasmo para vivir tu rutina de la mejor manera posible. A continuación, ¡conoce la oración que te ayudará a conciliar el sueño!

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Oración para dormir toda la noche y profundamente

"Padre mío, ahora que se han acallado las voces y se han apagado los gritos, aquí, al pie de mi lecho, mi alma se eleva hacia Ti para decirte: creo en Ti, espero en Ti, te amo con todas mis fuerzas.Gloria a Ti, Señor.

Pongo en tus manos el trabajo y la lucha, las alegrías y las desilusiones de este día que ahora queda atrás. Si me han traicionado los nervios, si me han vencido los impulsos egoístas, si he cedido al rencor o a la tristeza, perdóname, Señor; ten piedad de mí.

Si he sido infiel, si he dicho palabras vacías, si me he dejado llevar por la impaciencia, si he sido una espina en el costado de alguien, perdóname, Señor; esta noche no quiero entregarme al sueño sin sentir la seguridad de tu misericordia sobre mi alma, tu dulce misericordia, enteramente libre, Señor.

Te doy gracias, Padre mío, porque has sido la sombra fresca que me ha cubierto todo este día. Te doy gracias porque -invisible, amoroso, envolvente- me has cuidado como una madre en todas estas horas.

Señor, a mi alrededor todo es ya silencio y calma. Envía el ángel de la paz a esta casa. Relaja mis nervios, aquieta mi espíritu, libera mis tensiones, inunda mi ser de silencio y serenidad.

Vela por mí, Padre querido, mientras me entrego confiadamente al sueño como un niño que duerme feliz en tus brazos. En tu nombre, Señor, descansaré tranquilo, que así sea".

Para que esta oración sea eficaz, debes repetirla con atención y calma antes de dormirte. Si la rezas todos los días, se convertirá en un hábito en tu vida, como si formara parte de un ritual de sueño.

Así que mantén el cuerpo relajado y presta atención a las palabras que dices. Aprovecha para despejar la mente y deja las preocupaciones para más tarde. Te mereces descansar.

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Una forma de hacer que la oración sea aún más poderosa es aplicar unas gotas de aceite esencial de lavanda en la ropa de cama mientras rezas. Este producto te aportará toda la tranquilidad que necesitas para conciliar el sueño fácilmente.

Una vez que sepas qué puede ayudarte a dormir mejor, ¿qué tal si ayudas también a tus amigos a conciliar el sueño más rápido? Comparte los contenidos que te hemos presentado para que todo tu círculo de seres queridos reciba un impulso extra a la hora de cuidarse.

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